Qué saber
Lo que tal vez usted no sepa sobre la leche materna
Lo que tal vez usted no sepa sobre la leche materna
Antes de entrar en materia, una información sobre la inclusión: BMC considera que es importante reconocer el lenguaje inclusivo de género. Para los fines de este artículo, nos referiremos a la “lactancia materna”; sin embargo algunas familias pueden preferir utilizar el término “lactancia de pecho” o “leche humana”. Mientras lee esta información, sustituya los términos que mejor se ajusten a su familia y sepa que celebramos a todas las familias en sus múltiples formas, tamaños y orígenes.
Para los bebés....
- Los bebés que son amamantados suelen enfermarse menos. La lactancia materna reduce el riesgo de infecciones de oído, diarrea y problemas estomacales.
- Los niños que son amamantados tienen menos riesgo de padecer muchos problemas de salud a medida que crecen. Los bebés que NO son amamantados tienen un riesgo mayor de padecer asma (9 % más), diabetes
(35 % más) y sobrepeso/obesidad (26 % más) a lo largo de su vida que las personas que sí son amamantadas. Dado que los afroamericanos y otras personas de color en EE. UU. corren un riesgo mayor de padecer estas afecciones, es importante comprender los beneficios a largo plazo de la lactancia materna.
- La leche materna está hecha específicamente para su bebé. Esta modifica los niveles de los factores inmunitarios cuando usted o su bebé enferman para ayudarle a su bebé a mejorar más rápidamente. Además, salva vidas, especialmente entre los bebés prematuros o muy pequeños.
- La leche materna contribuye al desarrollo óptimo del sistema inmunitario, el aparato digestivo y el cerebro de su bebé. Los factores presentes en la leche materna contribuyen a la maduración completa de estos sistemas después del nacimiento de su bebé, ayudándoles a funcionar bien a lo largo de su vida.
Para los padres...
- La lactancia materna reduce el riesgo de cáncer de mama y de ovario en las madres. Las personas que han amamantado tienen un 22 % menos de riesgo de cáncer de mama y un 30 % menos de riesgo de cáncer de ovario que las mujeres que nunca lo han hecho. La lactancia materna también reduce el riesgo de las madres lactantes de sufrir depresión posparto e hipertensión y diabetes en el futuro.
- La lactancia materna le permite a su cuerpo recuperarse más rápidamente del embarazo y del parto. Las hormonas que se liberan cuando amamanta hacen que el útero se contraiga hasta recuperar el tamaño que tenía antes del embarazo.
- La lactancia materna puede ayudarle a perder peso. Las madres que solo amamantan a sus hijos pueden quemar hasta 600 calorías al día, lo que puede ayudarles a recuperar el peso que tenían antes del embarazo.
- Su cuerpo empieza a prepararse para la lactancia materna durante el embarazo. Las molestias que siente o el aumento de la talla del sostén se deben a que a su cuerpo le están creciendo más glándulas productoras de leche en los senos. Después del parto, su cuerpo recibe la última señal hormonal para producir leche en cantidades mayores.
- Antes de que empiece a producir leche, durante los primeros días después del parto, sus senos producen un líquido espeso, pegajoso y amarillento al que a veces se le denomina “oro líquido”. Este líquido, llamado calostro, contiene el calcio, el potasio, las proteínas, los minerales y los anticuerpos que su bebé necesita. Su bebé solo necesita unas pocas cucharaditas para sentirse saciado y mantenerse sano hasta que aumente su flujo de leche, entre dos y cinco días después del parto.
Para las conexiones entre padres e hijos y toda la familia...
- Su bebé puede olerle. Los recién nacidos tienen un gran sentido del olfato y conocen el aroma único de su leche materna. Es por eso que su bebé girará la cabeza hacia usted cuando tenga hambre.
- Su bebé puede verle de cerca. Los bebés nacen extremadamente miopes, lo que significa que solo pueden ver cosas a una distancia de entre 8 y 15 pulgadas. Esa es también la distancia entre su cara y la de su bebé durante la lactancia materna. Por eso, cuando su bebé le mira a los ojos, se crea un verdadero vínculo afectivo.
- Su bebé aprende día y noche y duerme mejor. Las hormonas en la leche materna ayudan a los bebés a aprender a dormir por la noche y a estar más despiertos durante el día.
- La lactancia materna puede ahorrarle a la familia entre $1,200 y $1,500 en gastos relacionados con fórmula para lactantes tan solo en el primer año de vida del bebé. También evita perder tiempo del trabajo para cuidar a los niños enfermos, ya que los bebés y niños amamantados se enferman con menos frecuencia.
- La leche materna cura. La leche materna está repleta de componentes especiales diseñados para ayudar a combatir las infecciones. Así que, si sus pezones están adoloridos durante los primeros días, masajear suavemente un poco de su leche en sus pezones puede aliviar el dolor y acelerar la recuperación. Pruebe a frotar leche materna sobre una herida, ya sea en su piel o en la de un niño mayor, y verá cómo se cura más rápidamente gracias a la gran cantidad de factores inmunitarios que contiene.
¿Qué pasa si tomo medicamentos?
- La mayoría de los medicamentos que toman las madres son compatibles con la lactancia materna y seguros para su bebé. Hay muchos factores que influyen en la posibilidad de que un medicamento pase a la leche materna y, en caso de ser así, en la cantidad que puede llegar a la circulación de su bebé después de tomarla.
- Hable con su médico sobre los medicamentos que toma. También puede leer sobre medicamentos específicos aquí [https://mothertobaby.org/fact-sheets/]
¿Qué pasa si fumo?
- ¡Puede amamantar! La lactancia materna sigue siendo beneficiosa para su bebé y puede contrarrestar algunos de los riesgos que puede provocar el hecho de que uno de los padres fume.
- Existen muchas opciones para ayudarle a dejar de fumar o a reducir su consumo durante el embarazo o la lactancia materna; hable con su médico sobre ellas. Fumar puede causarles muchos problemas de salud a usted y a las personas que respiran su humo. Usted y su familia estarán más sanos si deja de fumar o si reduce su consumo. Algunas mujeres no pueden dejar de fumar mientras están amamantando. Aun así, la lactancia materna es más saludable para el bebé.
- He aquí algunos consejos para mantener a su bebé lo más sano posible:
-Evite fumar justo antes de amamantar.
-No fume cerca de su bebé y no permita que nadie lo haga.
-Cámbiese la ropa después de fumar y antes de sostener a su bebé.
Me preocupa amamantar en público
- Esta es una preocupación común. En primer lugar, la ley de Massachusetts le protege: usted es libre de alimentar a su bebé como quiera hacerlo en cualquier lugar abierto al público (p. ej., en un restaurante).
- Los senos son, ante todo, un órgano para producir leche humana, no para que otras personas le miren o le juzguen por ello. Lo más importante es que se sienta cómoda alimentando a su bebé. Hay muchas formas de mantener su privacidad mientras alimenta a su bebé:
-Utilice una bufanda o una manta de bebé para cubrir a su bebé y su seno durante la lactancia.
-Cuando vaya de visita a casa de alguien, pregunte si hay algún lugar privado donde pueda alimentar a su bebé.
-Cuando salen de casa, algunos padres deciden alimentar a sus hijos con un biberón con leche materna extraída.
Fuentes e información adicional: obtenga más información y consejos sobre lactancia materna en
Reaching Our Sisters Everywhere: http://breastfeedingrose.org/benefits-of-breastfeeding/
Oficina para la Salud de la Mujer: https://www.womenshealth.gov/breastfeeding/making-decision-breastfeed#1
En Español: https://espanol.womenshealth.gov/breastfeeding/making-decision-breastfeed#1